Supongo que escribir una reseña de un libro que todavía no se ha leído es una tontería. Una gilipollez. La verdad es que estaba esperando a que saliese a la venta la última novela de Vila-Matas para escribir la primera entrada sobre el autor de Doctor Pasavento en este blog, pero sucede que no puedo esperar.
Me puede el ansia por hablar de Vila-Matas...
Y sin embargo, la verdad es que me cuesta mucho escribir sobre él. Me da miedo. Es tanta mi admiración (y algo de fanatismo también hay, no lo niego), tanto mi respeto, que temo que lo que pueda escribir no esté a la altura. Bueno, sé que NO está (no estoy) a la altura.
Coño, parece increíble, pero lo estoy pasando mal.
No voy a escribir más. No creo que a nadie le interese lo que pueda decir (que he leído todos sus libros, varias veces, y tal; no puedo decir otra cosa...) Basta de palabras, sólo una última cosa (¿un gesto?):
Cuando leo a V-M, cuando te leo, Enrique, soy feliz.
Jejeje!
ResponderEliminarLe ha quedado muy bartleby
Esperemos q no desaparezca y siga con sus entradas en el blog
Saludos
Gracias, Lalo.
ResponderEliminarVaya, no había pensado en Bartleby cuando escribía. La verdad es que cuando lo hacía sólo pensaba en..., terminarlo. Ahora que estoy pensando, me doy cuenta de que hablar sobre V-M no me cuesta (quiero decir, hablar en el sentido literal), pero escribir sobre él... Escribir es otra cosa.
Claro que estás a la altura de escribir sobre Vila-Matas. Y estoy convencida de que Vila-Matas estaría encantado de que escribieras sobre él. Así que échale valor, eso de ser un Bartleby está bien para los demás pero no para ti, Nathan.
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