domingo, 28 de noviembre de 2010

viernes, 5 de noviembre de 2010

"Nostalgia futura"



El año se me ha pasado, como suele decirse, volando. Dentro de un mes, cuando terminen mis vacaciones, miraré hacia delante y pensaré: todavía me queda un año por delante para volver, para disfrutar de nuevo de otras merecidas vacaciones. Qué largo. Y sin embargo, el año volará. Es así desde hace varios años ya, desde que cumplí los 25 o los 26.

Tres semanas en la montaña. Noches largas y mañanas para quedarse en la cama sin mirar el despertador. Tardes haciendo un poco de deporte. Alguna excursión a la civilización, también.

Muchos libros. Nada de internet. ¿Tele? Pues sí, tele sí habrá, pero no mucha.

Muchos libros. Lecturas que he reservado precisamente para estas semanas de silencio y tranquilidad: En-Nadar-dos-pájaros, de Flann O’Brien; Foe, de J.M. Coetzee; Una historia conmovedora, asombrosa y genial, de Dave Eggers; Job, de Joseph Roth; El bandido, de Robert Walser; y cómo no, la última de Vargas Llosa, El sueño del celta.

Todavía no me he ido y ya estoy pensando en la nostalgia de volver.